Comentario de las tres primeras estrofas de Los faros
Rubens, río de olvido, jardín de la molicie ,
cojín de carne fresca en que nunca amaremos,
mas donde fluye vida y sin cesar se agita
como el aire en el cielo y la mar en el mar;
Leonardo da Vinci, profundísimo espejo,
donde hechiceros ángeles, con ligera sonrisa cargada de misterio, se
insinúan en la sombra
de pinos y glaciares que enmarcan su país;
Rembrandt, triste hospital poblado de murmullos,
tan sólo decorado de un crucifijo inmenso,
donde el lloroso rezo sube de la basura
y al que un rayo invernal de súbito atraviesa;
1. El poema
titulado “Los faros” (Les phares en versión original), es
el número VI del libro Spleen e Ideal,
primera parte del libro del poeta Charles Baudelaire “Les fleurs du mal”, su obra principal. Se
trata un libro unitario en torno al tema de la angustia vital o spleen y a los
distintos caminos de evasión o salvación. Este autor está considerado el padre
de la lírica del siglo XX: Fue un poeta maldito que despreció la sociedad, además
de precursor del Simbolismo por acercar a él su mundo interior. [Estaría bien añadir que este poema, junto a El
albatros y Correspondencias explicitan las bases de la
concepción poética de Baudelaire]
2.-En cuanto al tema principal del
poema, se trata [de una exaltación o concepción] del arte que extrae lo bello a partir de lo feo, atroz o
malvado. [Falta el tema general de Las flores del mal]
La estructura se divide en dos
partes: las ocho primeras estrofas, dedicadas a artistas, y las tres últimas,
entendidas como una invocación o plegaria que explican las anteriores. Estas 11 estrofas están formadas por versos
alejandrinos con rimas cruzadas (ABAB).
3. La parte a comentar pertenece a
las tres primeras estrofas, en las que se apela a un pintor en cada una de
ellas. Las descripciones que secundan a cada nombre están hechas de misterio y
oscuras sensaciones que recogen la esencia del artista desde el punto de vista
de Baudelaire. [Se relaciona con la esencia del Simbolismo y su concepción de las "correspondencias": sensaciones oscuras y confusas que traducen la esencia de otra realidad, la esencia de cada artista citado, en el caso de este poema] Utiliza mayoritariamente el estilo nominal y metáforas que
tienen como núcleo un lugar, mayoritariamente, para explicar la obra del
mencionado y transmitir sus sensaciones.
En la primera estrofa, Baudelaire
comienza mencionando a Rubens y lo define de forma metonímica, es decir,
uniendo sus rasgos con los de sus obras: vitalidad, molicie, sensualidad…
Utiliza metáforas como río de olvido,
jardín de molicie, cojín de carne que
no sugieren un significado racional, sino que describen sensaciones. Todo ello
aparece comparado con los elementos del aire,
el cielo y la mar, que reafirman
las cualidades con las que ha sido descrito. Especialmente destaca la palabra vida, clave de toda su descripción.
La segunda describe a Leonardo da
Vinci de la misma forma que al anterior, atribuyéndole a este los rasgos de
misterio y sutileza. Se aprecian metáforas como espejo profundo y sombrío, y adjetivos valorativos como hechiceros ángeles, ligera sonrisa… Esta
estrofa es especialmente simbolista ya que muestra una cantidad de elementos
tales como espejo, ángeles, pinos,
glaciares, y sobre todo, la palabra misterio,
que trasmite la esencia del pintor.
La tercera estrofa está
dedicada Rembrandt y a su
espiritualidad. Baudelaire utiliza para describirlo, una figura que está a
medio camino entre la metáfora y la metonimia: triste hospital. En cuanto a la adjetivación, es la figura
predominante en la estrofa: triste,
inmenso, lloroso, invernal… Además, aparece el rayo como elemento simbolista entendido como una luz que penetra en
ese escenario tan oscuro que han planteado los adjetivos. Esta luz es también
un claro elemento religioso, al igual que otras palabras tales como crucifijo y oración.
Por último, cabe destacar que
Charles Baudelaire también fue crítico de arte, cuyos escritos tienen gran
valor; pues, a pesar de su brevedad, aúnan perfectamente los principales
problemas a los que se enfrentaba el arte, y más concretamente la pintura a
mediados del siglo XIX. [Quizás este comentario, iría mejor en el apartado de localización]
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